La segunda ciudad más grande de Colombia, se dio a conocer al ser la base operativa del cartel de Medellín encabezado por Pablo Escobar, uno de los hombres más ricos del mundo y el mayor narcotraficante del final del siglo XX. Hoy día Medellín es una ciudad muy segura que se enorgullece de su presente artístico y de sus plazas y parques.
De frente al museo de Antioquia, se encuentra la plaza de Botero, con más de 20 obras donadas por el artista que dan un encanto singular a esta zona. La plasticidad de las esculturas transforman la plaza en un museo al aire libre. La gente puede sentarse en la base de ellas o posar para sacar fotos. La policía está en todo momento velando para que el centro de la ciudad sea un lugar agradable y seguro.
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